Una de las consecuencias derivadas de la pandemia de la Covid-19 es un cambio en la percepción de las necesidades que ahora consideramos básicas a la hora de comprar una vivienda. Es decir, los largos meses de confinamiento han puesto en evidencia la necesidad de contar con un pequeño jardín o espacios abiertos. Podemos decir que la compraventa de pisos aumenta un 5% en la actualidad debido a una serie de cambios en las preferencias de compra.
Las personas empiezan a valorar aspectos como el contacto con la naturaleza, que antes eran totalmente secundarios. También se ha producido un cambio en la elección del lugar en que vivir. Los grandes núcleos urbanos empiezan a perder fuelle en detrimento de ciudades más pequeñas de la periferia o incluso zonas rurales.
La compraventa de pisos siempre ha ido ligada en mayor o menor medida a los diferentes ciclos económicos. El actual no es una excepción. La crisis económica producida por la Covid-19 ha puesto contra las cuerdas muchos sectores de la economía. No obstante, el sector de la vivienda puede tener una evolución diferente. A continuación, vamos a ver una serie de factores que pueden incidir en ello:
Un buen avance del ritmo de la vacunación, garantiza una mejora del contexto sanitario. Esto conlleva a una bajada de todas las restricciones y por ende una reactivación económica. Sobre todo, por parte de los sectores más castigados como han sido la restauración u hostelería. Esto conlleva en una mejora de la percepción económica. Se calcula que hay una demanda de ahorro embalsada de 30000 millones por parte de particulares y pequeños inversores. Esto puede activar enormemente el sector inmobiliario.
Se ha producido una caída de precios. En 2020 se cerraron un total de 420 000 operaciones de compraventa. El hecho de que los precios disminuyan, abre la oportunidad a los compradores de realizar una buena operación. Mucha gente espera a la caída de precios para poder comprar. También la gente que quiere vender lo hace ahora, no sea que los precios puedan bajar más y pierdan rentabilidad.
El confinamiento ha puesto contra las cuerdas a las grandes ciudades. Las personas empiezan a valorar el contacto con la naturaleza y disponer de un lugar al que salir ya sea un jardín o pequeña terraza. La superpoblación de las ciudades, el alto volumen de ruidos o la contaminación son factores que provocan que la gente abandone la vida en la ciudad. El auge del teletrabajo ha hecho que mucha gente se esté planteando vender su piso en la urbe y trasladarse a ciudades más pequeñas o núcleos rurales. El contacto con la naturaleza y la búsqueda de la calidad de vida son factores que mueven a las personas a buscar nuevas residencias.
Con base en todos estos factores podemos pronosticar que la compraventa de pisos podría aumentar un 5% durante este año 2021. A lo largo del año y dependiendo de la evolución de la crisis sanitaria veremos una activación del sector. Previsiblemente cara al segundo semestre. TODOPISOSPAIN.